jueves, 16 de abril de 2015

DEL BESO Y DEL ARTE

Podrían ser la misma cosa, o al menos de la misma causa y naturaleza. Se corporeizan para comunicar lo que sale del deseo vitalista, sensitivo o sensual. Lo mismo que intercambian sensaciones, ensimisman emociones. Son realidades que surgieron de la mirada de la fantasía; sendos lenguajes son universales, estimulan, remueven, conmueven. 


EL BESO Y EL ARTE

Y cada uno ha tenido su Día. Uno generado por la popular estupidez humana, el otro por la admiración a las maravillas de unos cuantos. Se puede decir, por tanto, que ambas celebraciones vienen a dar con la expresión común de "por amor al arte".

La necedad de la mayoría de las causas que se celebran en los llamados DÍAS CONMEMORATIVOS,  ha suscitado en los últimos tiempos un calendario paralelo o alternativo al tradicional y secular santoral. Todos los días del año hay una enfermedad común o rara que difundir; un vicio que combatir, una virtud que propagar; colectivos profesionales que aplaudir, actos históricos que lamentar. 

Antes se felicitaba a los Antonios, Pepes, Juanes, etc, como a las Anas, Cármenes o Marías, en su onomástica. A los que contraían matrimonio o generaban descendencia, sacaban unas oposiciones o les tocaba el cupón. Las Pascuas y, por supuesto, los Días Propios o cumpleaños de la gente que forman parte de la agenda vital y particular de cada uno. Y para de contar. Pero en el día de hoy se ha instaurado la costumbre de felicitar por ser mujer, gay o lesbiana, niño o mayor, o amante o simpatizante de vete a saber qué porque seguro que tiene su Día. Y esta semana, sin ir más allá,  hemos tenido dos celebraciones, que yo, para salvar de la necedad a la primera, el DÍA DEL BESO, la hago coincidir con la segunda, el DÍA DEL ARTE, porque, al fin y al cabo,  "un beso, puede crear un mundo" (O. Paz) , y el arte ha creado muchos besos.

Ninguno de los dos Días están en el calendario oficial de los declarados por la ONU o la UNESCO, como la inmensa mayoría, sin embargo fueron reclamados en su día por entidades -en este caso dispares- y se van difundiendo. El del Beso con mayor fortuna, porque el 13 de abril se está convirtiendo en el día de la pamplina de dar besos a diestro y siniestro por parte de cocolit@s que, sin venir a cuento, te felicitan y estampan una sonoridad labial en la mejilla (no estaría mal que existiera también el Día de Mandar a Tomar por... saco). Y todo por una chorra de concurso que ganó una pareja de Tailandia que sufrió el calvario de estar besándose más de 46 horas previa inscripción en las bases que exigían que los participantes estuvieran casado. ¿Cómo se va a reconocer oficialmente esto, estamos locos?

Tampoco se reconoce el Día del Arte, este mucho más minoritario, pues tan solo una élite se hace eco de esta proclamación, pues fueron los miembros de la Asociación Internacional del Arte, quienes en 2012 levantaron la mano y dijeron que también querían un Día. (Los artistas son tan ineptos que, como se podrá ver en el enlace a su web oficial, confunden el día señalado. Porque el elegido por ellos mismos fue el 15 de abril y no el 15 de marzo, (que ni era primavera ni nada), como reza en el encabezamiento de la portada. Dios mío, Arte sí, surrealista...). El día en que nació el máximo exponente de las artes englobabas. El Hombre del Renacimiento. No. De todos los tiempos. El Genio indiscutible, sin parangón hasta la fecha. Porque, ¿qué hubiera sido este hombre ahora, en la era de la especialización? ¿Pintor, científico, filósofo, inventor, naturalista, urbanista...? ¿Qué de todo ello y más?

Este Día sí tiene fundamento. Da Vinci, hasta que nazca alguien de la misma estirpe, merecería el Día de la Genialidad. (Entonces, felicitaciones, las justas).

No me voy a extender en pormenores de  todo su infinito legado, pero sí dejar constancia del único invento que Leonardo diseñó y que se ha llevado a la práctica tal como lo había concebido el inventor. Porque, aunque, pensó y anunció la escafandra de buzo, el submarino, el carro de combate, el automóvil, la bicicleta, una máquina voladora, el puente giratorio, el paracaídas, el tornillo aéreo (que nunca existió porque una aeronave solo admite remaches, lo sé de buena tinta...), el cañón múltiple (la primera arma de destrucción masiva), el anemómetro...  todos ellos necesitaban de tiempo futuro y de otras mentes tecnológicas que los pusieran a funcionar con éxito. (Y me salto la Gioconda, la Última Cena, las Madonnas, la ingeniería urbanística, la anatomía, la botánica, etc, etc). Pero Da Vinci inventó un instrumento para cuya construcción se siguieron los bocetos e instrucciones del italiano. Y se puede tocar hoy en día . La viola organista. Un instrumento que nunca había llegado a fabricarse, pero el pianista polaco Slawormir Zubrycki se afanó con fe y lo consiguió después de emplear 5.000 horas en su construcción. Un instrumento que se toca como un piano pero suena a violonchelo por la rotación de las ruedas dentadas en las que frotan las cuerdas internas... Bueno, no sé, pero suena así.






Semana de 

Beso y Arte, 
del arte del beso (sin pamplinas) o de los besos  del arte (panaceas).

 Aquí, dejo solo unos cuántos, porque se seguirá celebrando. 


EL BESO. Théodore Géricault. Francia (1791 - 1824)




LOS AMANTES. Jan Svankmajer. Artista checo. 1934 - ?



Franz von Stuck. Pintor. Baviera, 1863 - 1928. EL BESO DE LA ESFINGE



EL BESO. Rodin. Escultor. Francia, 1840 - 1917.


LOS AMANTES. Dante Gabriel Rossetti: poeta, pintor, ilustrador. Inglaterra, 1828 - 1882.




LOS AMANATES. René Magritte, pintor belga. 1898 - 1967




Elizabeth Taylor y Richard Burton. CLEOPATRA (1963)




 Sophia Loren, Marcello Mastroianni. UNA JORNADA PARTICULAR (1977)



  1.  James Stewrt, Donna Reed. QUÉ BELLO ES VIVIR (1946)



Burt Lancaster, Deborah Kerr. DE AQUÍ A LA ETERNIDAD (1953)


También besos-arte-besos de Galeano.
Los que te has llevado estos días y nos dejas para siempre.




Y para la pareja del concurso, 

ÉRASE UNA VEZ... 

UN DÍA, CUALQUIER DÍA...



¿A QUE SUENA A BSO?